Normalmente el inicio de una nueva temporada posterga lo importante. Se invierten las cosas y lo urgente desplaza a lo importante. Se corre detrás de técnicos y jugadores y se hacen y rechacen listados de buena fe, todo para cumplir con cronogramas tan lógicos como incumplibles. Disuelta la nube lo que queda es lo siempre estuvo y, vuelta a empezar. Comienza una nueva temporada para los equipos del sistema y los demás partenairs que por defecciones propias y favores recibidos están obligados a callar. Con bombos y platillos la web adicta difundió la entronización de los torneos "Provincia Seguros". Sin embargo nada informó y menos ilustró sobre los pormenores de un acuerdo que en la medida que aporte a la financiación de la Liga y alivie a los clubes, por exiguo y mínimo que fuera: ES POSITIVO. No hay detalles del contrato ni menos de los aportes que esa empresa del grupo BAPRO trae a la Liga.
Cesaron intempestivamente los raides del tarambana cada vez que jugaba Gimnasia de local, para ir a buscar migajas a la sede de la calle 4 de manos del viejito bueno. Ahora, ¿cuánto percibió la Liga por los partidos que Estudiantes de La Plata disputó como local en el Estadio Ciudad? - tanto del torneo local como de la copa, se entiende-. Y por el clásico? Nadie sabe o nadie quiere decir que la Ordenanza por la gestión de cobranza del Derecho de Espectáculo está derogada de hecho.
Nadie anuncia porque no es políticamente correcto decir que la Liga a los clubes este año le sale mas de $ 2000 mensuales y que el único y real incentivo es ser parte de una runfla bien chiquita que reparte prebendas y privilegios a cambio de silencio y fulbito. Después de largos liderazgos, en general, sucede un idiota al que por angustia, sopor y rabia las mayorias lo eyectan tan rápido que su paso se torna efímero y absurdo. Una entidad centenaria no podía privarse de su De la Rua. Todos lo sabemos se puede volver de todo menos del ridículo.
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