Hace meses venimos advirtiendo que con un juego de pinzas, perfectamente articulado, entre los clubes llamados "grandes" y el gobierno nacional, con el Presidente Mauricio Macri a la cabeza habían sellado un acuerdo con Giani Infantino, presidente de FIFA para sortear una intervención que desembocara en la suspensión de la afiliación de la AFA, con el impedimento de disputar la Copa América Centenario y las semifinales de la Copa Libertadores de América por parte de Boca Juniors.
La mejor alternativa ha sido la creación de una Comisión Normalizadora integrada por representantes de FIFA, del gobierno (Ocaña y Marín) y algún sector mediático que brinde inmunidad y cuidado mediático (Daniel Vila Grupo América-Radio La Red).
Con la posible llegada de Ocaña la figura a esmerilar es la Moyano quien junto a su yerno Claudio "Chiqui" Tapia ha venido adquiriendo mas peso en el fútbol del ascenso y del interior (Ligas y clubes de la B Nacional) del que Macri y sus acólitos están dispuestos a soportar.
Lo peor está por venir.
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