La FIFA puso punto final a una transición que se presentó por demás razonable y terminó convirtiéndose en una ocupación "de facto" del despacho del tercer piso del edificio de la calle Viamonte 1366.
Luis Segura, un dirigente con un "pedigree" demasiado cuestionable -compartió Comisión Directiva con Guillermo "pajarito" Suarez Masón uno de los genocidas mas crueles de la dictadura cívico militar del período 1976-1983- llegó al sillón de Don Julio por su inesperado deceso, y casi a continuación de que fuera escrachado por la cámaras de TV revendiendo entradas en la concentración de la última Copa del Mundo FIFA, Brasil 2014. El mismo que unos meses antes de ese mundial anunciara su renuncia y retiro de Argentinos Juniors y la AFA con bombos y platillos y ahora tuvo que ser echado para que vacíe los cajones y se vaya a su casa a ocuparse con sus abogados del procesamiento que acaba de dictarle la jueza Servini de Cubria.
Atrás quedarán sus ambiciones injustificables e inexplicables de continuar siendo Presidente hasta 2019 apoyado por las ahora huestes moyanistas y el operador Macrista, Angelici.
Presidió la tristemente célebre asamblea del 38 a 38 y con eso mas esta patada voladora que acaba de asestarle Infantino quedará en la historia.
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