TRISTE, SOLITARIO Y FINAL

"Hasta la vista, amigo. No le digo adiós. 

Se lo dije cuando tenía algún significado. 

Se lo dije cuando era triste, solitario y final." 

 Philip Marlowe en El largo adiós

Inicio de la novela de Osvaldo Soriano: 

Triste, solitario y final.

Mientras en la mayoría de los clubes liguistas imperaba un malestar creciente, por la prematura suspensión de la jornada de ayer sábado-sin lluvia y con viento suficiente para orear la mayoría de los campos de juego- Castagnini, "el breve" emprendió un tour a Tandil, donde se reunía la Federación de Fútbol Bonaerense Pampeana, para buscar consuelo. A contramano de lo que cantaba Gardel, Castagnini fue al encuentro de "...esas caras extrañas y de su limosna que alivien su tormento."

Las reuniones de la Federación se han transformado, de un tiempo a ésta parte, en retiros espirituales donde sus asistentes hacen catarsis. Se habla de todo pero no se define absolutamente nada. Se abre el juego para decir lo mismo con distintas palabras. Nadie gana, nadie pierde. Tan solo exponer las frustraciones de seguir en una carrera que cualquier mortal, con dos dedos de frente, sabe que no conduce a ningún lugar.

Como el decadente boxeador de la novela de Soriano, Castagnini viajó a Tandil a su último combate, desigual y con resultado cantado. No alcanzan los trucos y las mañas aprendidas. Irrumpe un nuevo orden-representado por el joven adversario-que llevará a los golpes, al viejo gladiador, a su triste final.

¿A quién representaba Castagnini, el breve en el mítin de ayer? Todos en ese recinto sabían que la Liga Amateur Platense está intervenida y que el acto administrativo de intervención (de la Dirección de Personas Jurídicas) ha sido homologado por la Cámara de Apelaciones. ¿Entonces? 

Para sumar más humillación, aún, el Juez Cattogio rechazó-innecesariamente- la medida autosatisfactiva presentada por los abogados del breve y condenó a la Liga al pago de las costas causídicas. En el piso e inerme todos se le animan al pobre y breve Castagnini y, "Su Señoría", quiso hacer doctrina con una sentencia de nulo vuelo jurídico.

Todos, ayer por la tarde, palmeaban el lomo de un decadente Castagnini que, como se aprecia en la foto está con las manos entrecruzadas y los hombros caídos. La representación más acabada de la derrota. Ese papelón se carga a la cuenta de una Liga Amateur Platense con más de cien años de historia y frente a ligas que no escribieron ni dos páginas en los anales del fútbol provincial. 

Si lo que tenés para ofrecer es lástima mejor sentate en el fondo y no en primera fila para que te velen de cuerpo presente.

Este medio conversó con uno de los asistentes que con mucha razón recordaba: "...y pensar que una espina del mismo palo los limpió, bah, se limpiaron entre ellos pero, ojo, Artequita es peor". La banda en disolución no puede ocultar que ésta caída del breve es un ajuste de cuentas.

Otro asistente, no sin sorna acotaba, "...hace diez años que no presentan ni un Patoruzito en Jurídicas, un papelón". Los seis meses de Castagnini que, a Dios gracias, fueron breves no hicieron más que sumar escarnio y burla de las Ligas colegas y vecinas.

Se cierra un etapa lamentable, sin brillo deportivo, decadencia institucional y política y, para redondear: dando lástima.

Solo hay que pedirle a Dios que "...si un traidor puede más que unos cuántos que esos cuántos no lo olviden fácilmente".