REFUTACIONES

Mientras Mazzacane sigue sin dar la cara y un personaje de tercer orden, en gira por algunos medios, se empeña de modo desopilante, en tapar el sol con las manos, la muerte de Georgina Galvez antes que llevarnos a la verdad nos quiere meter en el lodo de la infamia y el descaro.

No se polemiza con los hechos. Bien, recordaba el ex magistrado de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, Carlos Fayt: "Los hechos son sagrados, las interpretaciones son libres".

Hemos sido claros en nuestra entrada anterior al quitar a la muerte de Georgina Galvez de la lógica culpable/inocente. Pero sí destacamos -y lo seguiremos haciendo- la negligencia, torpeza y falta de expertice que configuran la responsabilidad civil de los organizadores, o sea, Consejo Federal de la AFA, Ligas Amateur Platense de Fútbol y de Las Flores; el matrimonio que transportó a la jugadora Galvez en su vehículo particular; la empresa de ambulancias que se prestó al trasbordo de una persona agonizando en medio de un camino atestado de vehículos, luego de salir de al menos un paro cardio-respiratorio, y sigue la lista.

Decir que la exigencia reglamentaria es tener un médico en cancha y no una ambulancia es tan absurdo como exigir una cantimplora y pero no agua para cargarla. Algo así como que la canilla mas cercana este a 50 cuadras de la cancha. Patético vice.

Si había un médico en cancha ¿por qué la Reanimación Cardio Pulmonar, en adelante RCP lo practica una jugadora (que afirma este buen hombre) es "enfermera especializada" y no el médico? ¿O será que el galeno contratado no tiene preparación en emergencias? No va a ser la primera vez que una Liga para cumplir el requisito y que el árbitro no le suspenda el partido haga comparecer un ginecólogo o un obstetra para que ponga el sello en la planilla.

Es miserable, sin dudas, ir contra la deportista fallecida. Que si estaba medicada; si tomaba la medicación; si la había traído a La Plata, que si la Liga de Las Flores controló el apto médico, en fin, actitudes de pusilánimes. Hace buena dupla con el balbuceante. Miserias en momentos de pánico y hundimiento dónde los hombres se disfrazan de mujer para subir primero a los botes. Lo más sencillo es culpar a quien no está para defenderse.

Sí, señor Castagnini o como se apellide duela o no son co-responsables y cuando le notifiquen la demanda verán cuanto lo son. ¿Así que se paró en la puerta? Muy útil ponerse de portero en medio de una crisis que involucra a la institución que representa.

Y si como ilustramos con un tramo del reportaje que este pelele dió en el canal QM del grupo infocielo si para ser inclusivos se resignan medidas de seguridad, señor, están tomando riesgos y en ese caso si acaece una desgracia expone a la Liga a las consecuencias. Si  no sabe esto que es elemental dedíquese a otra cosa.